No a Keiko: Carta abierta
Situación del sector educación
Vemos con absoluta indignación la sucia manipulación que ha ejercido Fuerza Popular en la huelga del magisterio. En este contexto, Keiko Fujimori y sus 72 lacayos parlamentarios, no solo se negaron a participar de las mediaciones con docentes que iniciaron todas las bancadas del Congreso para solucionar la huelga, sino que mientras éstas se daban, se dedicaron miserablemente a sabotear los avances del diálogo, llamando a los dirigentes de la huelga a ofrecerles facultades legislativas, indisponiendo los acuerdos logrados con las demás bancadas parlamentarias. Fuerza Popular se ha dedicado así a jugar con las expectativas de los profesores con paquetes legislativos para prolongar la huelga y debilitar aún más al Gobierno. Una vez más, demuestran que no le importa solucionar los problemas del país, ni que los alumnos retomen las clases, si eso no le da réditos electorales a su fracasada líder. El boicot que han hecho del diálogo con los docentes es solo fina muestra de alguien de la talla de Keiko Fujimori, de quien ya sabemos que además de ser una mala política y una mala candidata, es aún peor perdedora. Si 8 millones de niños, niñas y jóvenes pierden el año escolar, se lo atribuiremos enteramente a su politiquería barata y despecho visceral que -sumado a la debilidad del gobierno- vienen destruyendo el país.
“Fuerza Popular se identifica con maestros, sean o no terroristas o del Movadef”
La frase anterior fue pronunciada recientemente por la congresista de Fuerza Popular Yesenia Ponce. Un lapsus que delata el doble discurso del fujimorismo en acción. Durante la campaña se dedicaron a calificar a sus opositores políticos como "terrucos" o "pro terrucos". Recordemos, por ejemplo, las fotos truchas de Verónica Mendoza ya sea con una bandera roja o con una supuesta visita a una falsa "Casa de Abimael Guzmán", retuiteadas alegremente por el par Tubino-Becerril. Pero resulta que este último acoge en el congreso, sin ningún reparo, a dirigentes vinculados directamente con el Movadef (un brazo legal de Sendero Luminoso) tales como: Melva Cardenas Castro, Fausta Garay Arce, Guillermo Enrique Dávila Llatas, Vicenta Angulo Rejas, Renato Achata Landaeta, Roger Apolinar Ortiz, Paul Silvio Gutierrez Ticona, Germán Adolfo Tacuri Valdivia y Edgar Tello Montes (!).
Convenientemente, el acuciante problema del magisterio también distrae la atención pública de la incómoda mención a Keiko en las agendas de Jorge Barata, quien tenía a su cargo las negociaciones de Odebrecht en Perú.
Comprobamos lo que siempre hemos afirmado desde estas páginas: el fujimorismo no tiene otra bandera que lograr el poder a toda costa. La subversión que tanto mentaron durante la campaña pasada, resulta ser solo un discurso para despertar el odio hacia sus enemigos. Vemos que se demuestra una sospecha histórica: el terrorismo es funcional a los intereses del fujimorismo. Un electorado con temor siempre elige la opción más autoritaria.